La economía cayó un 4,2 por ciento en el segundo trimestre. La actividad económica se vio afectada por el derrumbe de las exportaciones por la sequía del agro y la baja del consumo público. Es el peor resultado de la era Macri. Para el próximo trimestre se espera un desplome aún mayor a raíz de la corrida cambiaria y el redoblado ajuste fiscal.
La economía argentina cayó en el segundo trimestre un 4,2 por ciento en relación al mismo período del año pasado, afectada por el derrumbe de las exportaciones por la sequía del agro y la baja del consumo público, informó el Indec.
Los sectores más afectados por la caída de la actividad en el segundo trimestre fueron el agro, pesca, industria manufacturera, comercio y transporte y comunicaciones.
El segundo trimestre marca el comienzo de una profunda recesión económica cuyo final nadie todavía se anima a arriesgar. Hay factores coyunturales que motivaron la marcha atrás de la economía, como por ejemplo la fuerte sequía que recortó la cosecha de soja, principal motor de la generación de divisa, con impacto sobre el sector metalúrgico y químico. También la suba de tasas de interés de los Estados Unidos y las disputas comerciales globales complicaron el escenario internacional.
Los factores coyunturales como la sequía, la suba de tasas de interés de EEUU y disputas comerciales globales, se montaron sobre una serie de debilidades generadas o amplificadas por la gestión de Cambiemos. La libertad total para la fuga de capitales, la apertura comercial y la eliminación de restricciones a la liquidación de divisas son algunas de ellas.
En función del impacto de la crisis cambiaria y del redoblado ajuste fiscal, se espera que el tercer trimestre (julio-agosto-septiembre) tenga un resultado todavía peor.